Con la finalidad de mejorar la calidad de vida de los voladores en ciudades y comunidades donde no reciben ningún apoyo por autoridades gubernamentales, se trabaja de manera coordinada con las delegaciones para que puedan obtener un salario a fin de que sigan preservando dicha danza tradicional y otras que tienen como identidad propia.
Sinforiano Morales Hernández, danzante y volador agremiado del Grupo de Voladores Totunaku, México,dijo que es lamentable la situación de varios pueblos indígenas de Guatemala, Belice y Nicaragua, donde preservan la danza del volador, ya que además de arriesgar sus vidas en el "Palo Volador", lo hacen por poco dinero, pues sólo reciben donativos.
Comentó que tiene conocimiento de varios indígenas guatemaltecos y de Nicaragua que viven de forma precaria sin el apoyo de sus autoridades federales y que no cuentan con la oportunidad de detonar su riqueza cultural, ni de mejorar sus vidas y las de sus hijos.
Debido a lo anterior, es que se acercando a ellos, debido a que se observa el apoyo que reciben "tan es así que gracias a la Cumbre Tajín hemos mejorado nuestra calidad de vida, pues estamos agrupados, contamos con un salario que no es mucho pero nos sirve para mantener a nuestras familias, ser volador es como cualquier otra profesión y nos dignifica".
Comentó que tiempo a tras no contaban con los recursos suficientes para mantener a sus familias, ni tenían oportunidades, sin embargo, con la Cumbre Tajín se les brinda el apoyo de las autoridades.
"Ahora es tiempo de ayudar a nuestros hermanos que realizan esta danza en sus países y que no tienen las mismas oportunidades que ahora los voladores de Papantla tenemos", reiteró.
Indicó que también se trabaja en un proyecto para ayudarlos, "aunque todavía no sabemos muy bien como lo vamos a realizar".
No aceptan mujeres
Por otro lado, dejo en claro que el grupo de Voladores Totunaku no acepta a las mujeres participar en la danza del volador, ni mucho menos que vuelen en el "palo volador" de 33 metros de alto.
Dijo que esta norma está estipulada en su reglamento ya que son distractores para los hombres, además que causan problemas y falta de concentración en la agrupación.
Señaló que ser volador es difícil pues requiere de mucha práctica, concentración y estar bien de salud, sin problemas cardiacos ni nerviosos. "las mujeres en su mayoría son nerviosas, no lo sé, pero son diferentes a nosotros y son un gran distractor para los hombres, no podíamos compartir con ellas esta profesión por eso no las aceptamos, si de por si hay hombres que al subirse al Palo Volador se caen y mueren imagínate ellas, es más difícil", agregó.
Comentó que tienen conocimiento que en Cuetzalan, Puebla, existe un grupo de mujeres voladoras y que han sido reconocidas mundialmente por su valentía en realizar la danza de altos vuelos, "sin embargo nosotros no compartimos esta idea, ellos si las aceptan porque han de tener su porque y porque han de tener estipulado en sus reglamentos que son las mujeres aceptables, pero diferimos de ellos en ese aspecto, además que la danza es diferente y se visten de otra forma."
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