La administración del Parque Nacional Tikal, en Petén, inició operativos y monitoreos de los bosques, para prevenir la talas, a fin de garantizar la conservación de los recursos naturales de ese sitio arqueológico.
Élmer Tún Castellanos, administrador del Parque Nacional Tikal, explicó que a raíz de los últimos decomisos de caoba y cedro extraídos de áreas protegidas aledañas al sitio arqueológico y la laguna Yaxhá, guardabosques y agentes de la División Protección a la Naturaleza (Diprona), de la Policía Nacional Civil, comenzaron operativos y monitoreos en lugares donde se tiene información de talas.
Añadió que se trabaja en El Zotz y La Perra, debido a que son las áreas más vulnerables.
Según Tún, la finalidad es capturar a depredadores y controlar y velar, para que no saqueen los cientos de montículos arqueológicos que se encuentran en el Parque.
Mencionó que en los últimos decomisos se contabilizaron más de cinco mil pies de cedro y caoba, que en el mercado negro puede cotizarse en Q100 mil. “Al momento de localizar un área depredada en un radio de 25 metros, se realiza un conteo de los árboles en pié”, refirió.
De acuerdo con Mariela López Díaz, directora regional del Consejo Nacional de Áreas Protegidas (Conap), en la entrada de Tikal hay un puesto de control fijo, integrado por guardarrecursos de esa dependencia, efectivos militares y de la Diprona, quienes regularmente apoyan en operativos en Tikal.
Agregó que el objetivo de vigilar este lugar turístico es evitar que esta masa boscosa se vea afectada por quienes negocian en forma ilícita con el producto maderable.
Resaltó que existen más de 10 puestos de control en Petén.
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