Centroamérica es amenazada por el narcotráfico, las pandillas y el crimen organizado transnacional, y para ayudar a combatir esos problemas es necesaria la unión del Istmo, dijo el presidente de la Federación de Entidades Privadas de Centroamérica, Panamá y República Dominicana (Fedepricap), Carlos Amador.
Durante una rueda de prensa efectuada en la Cámara de la Industria de Guatemala (CIG), Amador presentó la propuesta “Seguridad y defensa regional”, que visualiza una Centroamérica amenazada por el terrorismo, el trasiego de armas, el narcotráfico, la trata de personas, las pandillas, el lavado de dinero, el contrabando y la evasión aduanera.
“Estos son los males que afligen al Istmo, los cuales no lo dejan despegar económicamente”, refirió.
Philiph Chicola, director de la Unidad de Gestión Pública del Comité Coordinador de Asociaciones Agrícolas, Comerciales, Industriales y Financieras (Cacif), hizo una presentación de las nuevas amenazas que afectan a la región y puntualizó que el empresariado está comprometido con apoyar a resolver ese problema regional.
Expuso como herramientas para combatir esos males a la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (Cicig) y la Iniciativa Regional de Seguridad Centroamericana, (Carsi, en inglés).
Además, habló de una comisión permanente para erradicar la producción, el tráfico, el consumo y el uso ilícito de estupefacientes, sustancias sicotrópicas y delitos conexos.
Actualizar mecanismos
Amador refirió que se debe actualizar y fortalecer el Tratado Marco de Seguridad Democrática firmado en 1995, y que la Federación de Fuerzas Armadas de Centroamérica debería transformarse en una institución de análisis y generación de propuestas para la defensa del territorio centroamericano
También criticó la falta de voluntad política y estatal para la integración, lo cual no ha permitido aumentar el potencial económico.
Explicó que si se logra avanzar en la unión política a la misma velocidad que en la económica, Centroamérica podría convertirse en una región increíble y lograría avanzar en cinco años lo que se ha tardado en 50.
Los aportes que propuso la Fedepricap son la proyección de la región hacia China y la Unión Europea y el seguimiento a la reforma institucional y el trabajo de relacionamiento empresa-academia —en materia de educación—. Además, apoyar activamente la presencia de la entidad en foros regionales y acompañar en las cumbres centroamericanas. “La criminalidad se debe combatir unidos”, indicó Amador.
Participación real
De acuerdo con el analista, es necesaria una política que incluya a todos los países centroamericanos para combatir la inseguridad.
A diferencia de años anteriores, en donde fuerzas militares eran la amenaza, ahora se debe combatir a los carteles de la droga y a grupos clandestinos que hacen uso de tecnología moderna para operar, refirió.
“Una Centroamérica libre y segura es tarea de todos. Nos comprometemos a trabajar, pero es necesaria la participación de organizaciones sociales y de los gobiernos de cada país”, dijo Amador.
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