Candados

Preocupa control del presupuesto

Diputados y analistas coinciden en que, si bien el nuevo presupuesto 2011 es más ordenado y mejora la posibilidad de fiscalización, los candados aplicados son pocos e insuficientes para impedir las transferencias que siguen dependiendo de la voluntad del Ejecutivo.

Los candados aplicados en el artículo 34 y 37 del presupuesto 2011 buscan impedir transferencias o disminuciones de recursos asignados a ministerios en áreas sensibles como Salud, Educación y Gobernación.

También se establecen impedimentos a transferencias a las asignaciones aprobadas para el Ministerio de Comunicaciones y el Fondo Nacional para la Paz (Fonapaz), además de que se impide aumentar el presupuesto del programa Mi Familia Progresa (Mifapro) fijado en Q1 mil 26 millones.

Sin embargo, los analistas consideran que evitar los movimientos de los recursos dependen del Ejecutivo y que los candados abarcan pocos ministerios, por lo que se deja abierta la posibilidad de transferencias y ejecución por medio de organizaciones no gubernamentales (ONG).

La diputada Nineth Montenegro expresó: “Colocamos candados, pero el Ministerio de Finanzas tiene la llave”.

Añadió que si bien el nuevo presupuesto es más ordenado y da la posibilidad de fiscalización, dejó puertas abiertas.

Opinión similar tiene la diputada Rosa María Ángel de Frade, quien expresó que a pesar de que el nuevo presupuesto es más ordenado y que facilitaría la fiscalización, es el Gobierno quien tendrá la palabra final.

“Se peleó por más candados y que se redujeran más recursos a espacios como publicidad, pero aún así quedaron muchas instituciones con posibilidad de hacer transferencias, incluso a programas que pueden ser utilizados para clientelismo, como la Bolsa Solidaria, aunque se logró limitar a Mifapro”, aseveró.

La legisladora lamentó que no se pudiera prohibir que los consejos de Desarrollo utilicen a las ONG para ejecutar obra pública.

“No se pueden modificar los techos presupuestarios a otras instituciones, pero cuando se van generando los ingresos, el Gobierno puede establecer la prioridad de los recursos a cada institución”.

La analista política Carmen Aída Ibarra dijo: “Históricamente hubo intenciones de controlar la ejecución presupuestaria a través de candados, pero la realidad siempre es la danza de transferencias en forma incontenible, los candados no han funcionado en la práctica, si el Ministerio de Finanzas no lo quiere así”.

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